LA IMAGEN ESPACIAL. FOTOGRAFÍA Y NARRACIÓN EN LA CRÍTICA DE ARQUITECTURA DURANTE LA SEGUNDA POSGUERRA
Palabras clave:
Imágenes espaciales, Imágenes textuales, Imagen como documento, Imágenes que traducen, trayectos de lo no visual a lo visualResumen
Hacia principios de la década del cuarenta del siglo XX en los estudios de Historia y Crítica de la Arquitectura tuvo lugar una revisión de algunas teorías estéticas alemanas de fines del siglo XIX y principios del XX, como las de Schmarsow, Riegl, Lipps, Brinckmann y Hildebrand, que habían puesto una atención especial al concepto del espacio como la materia específica de la disciplina. Este enfoque, renovado con el aporte de las teorías de la percepción y la fenomenología, originó nuevas interpretaciones espaciales en la crítica arquitectónica, entre ellas, la tan difundida del crítico italiano Bruno Zevi. No obstante, otros trabajos contemporáneos como los de Goldfinger, Zucker, Rogers y Tedeschi también basaron sus descripciones arquitectónicas en un método que evitara un análisis geométrico o sintético de formas y elementos constructivos utilizando, en su lugar, categorías apoyadas en observaciones visualistas como “densidad”, “continuidad”, “textura” y “plasticidad”. Los estudios críticos de estos autores describen textualmente imágenes dinámicas que reviven experiencias espaciales sirviéndose particularmente de un énfasis en la continuidad como argumento principal de la percepción de la forma y el espacio. La utilización de estos recursos como vehículo para traducir formas arquitectónicas en descripciones visuales había sido propuesto a principios de siglo por Henry van de Velde apoyándose en la idea de la vivificación de la materia y en la expresión de la línea como entidad representativa de una supuesta energía vital implícita en las formas. Lo novedoso en las narraciones críticas hacia las décadas del cuarenta y el cincuenta, es que fueron habitualmente acompañadas por registros fotográficos que ilustraron, por medio de imágenes instantáneas, una nueva interpretación estética de la arquitectura, complementando las descripciones sobre la configuración de los límites del espacio, con el punto de vista relativo del observador.
Este trabajo se propone examinar de qué modo la imagen fotográfica y la imagen textual constituyeron herramientas interactivas capaces de traducir esa sustancia espacial que se intentaba posicionar en el centro de la distinción entre la arquitectura y las artes visuales. Por medio de recursos literarios y fotográficos, la introducción de esta clase de imagen espacial desvió la atención sobre la forma estática en cuanto resultante de una composición y se reorientó hacia la percepción de los fenómenos vividos, poniendo en crisis la entidad objetual de la arquitectura.