Editorial

Abstract

La experiencia de este año nos ha permitido verificar el avance tecnológico que hoy en día tienen los archivos y bibliotecas de nuestro país, al poseer gran parte del material no solo digitalizado sino puesto en la web para su consulta. Por otra parte, confirmar que reservorios de otros países poseen documentos gráficos (planos, catastros, etc.), fotografías y escritos de nuestra historia -en soporte digital- expuestos en sus páginas de internet. Estas medidas contribuyen a que continuemos realizando investigaciones desde nuestros respectivos domicilios, a pesar de la terrible pandemia que hemos atravesado con cuarentena inclusive. El haber experimentado nuevos apoyos tecnológicos y su uso, lo cual ha sido sumamente positivo, no nos impide reconocer la necesidad de regresar al vínculo cara a cara pues es una forma insustituible de afianzar las relaciones interpersonales entre docentes y estudiantes.