Bosques Asociados. Construyendo conexiones entre ciudades y bosques en la periferia urbana del Área Metropolitana de Buenos Aires

Abstract

¿Qué pasaría si todas las ciudades importantes del mundo decidieran desempeñar un papel en el mantenimiento de los bosques más importantes del mundo? Este sería un tango dramático para nuestra región entre socios carismáticos, cada uno como un apéndice a la naturaleza y al entorno construido.

Con su alta concentración de personas, influencia y consumo, las acciones de las ciudades serán clave para cumplir los objetivos del cambio climático y proteger el planeta. Los bosques tropicales contienen grandes cantidades de carbono, albergan la mayor parte de nuestra biodiversidad terrestre y desempeñan un papel vital en el mantenimiento de los ciclos del agua. Las ciudades a menudo desconocen que su consumo es responsable de la mayor parte de la deforestación tropical, a través de productos cotidianos como madera, aceite de palma, soja, caucho, cacao, metales, petróleo y café. Y aunque los bosques tropicales representan “el 30% de la solución climática total” (Seymour & Busch, 2016), las ciudades aún no han incorporado la conservación de los bosques en sus agendas de cambio climático.

La idea detrás de Bosques Asociados es conectar ciudades con áreas y comunidades específicas de bosques tropicales para beneficio mutuo, especialmente en apoyo de estrategias de conservación y restauración de bosques. Esta asociación tomará varias formas, por ejemplo, el uso de madera de origen sostenible del bosque en un hito visible de la ciudad (de esa área del borde urbano), o el uso de productos forestales no maderables, como el caucho, el café o el cacao de una manera creativa y sostenible.