Categorías para corredores metropolitanos: el caso sud-sudeste

Résumé

Durante la segunda mitad del siglo XX, la conformación metropolitana de Buenos Aires, se categorizó según las demandas y la oferta o las infraestructuras. Hoy, la planificación de la movilidad, evoluciona explorando nuevas categorías para tal conformación, tratando de superar las antiguas dicotomías entre una planificación basada en la demanda o una planificación basada en la oferta de transporte.

Los corredores metropolitanos del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) surgieron a partir de la consolidación de nodos de la red ferroviaria, que mutaron de sencillas estaciones entorno a las cuales surgieron incipientes pueblos bonaerenses, a pujantes centros comerciales y residenciales promediando el siglo pasado. Tales fueron los casos, por ejemplo, del Corredor Oeste o del Corredor Sur.

En esas instancias de evolución metropolitana, la categoría propia local la rotuló como Conurbano Bonaerense: una creciente mancha urbana que se extendió a lo largo del último siglo hasta un radio de 60 km. desde el centro metropolitano hasta la Ruta Provincial 6, la más periférica semi-circunvalación.

Pero lo destacable del Conurbano, fue su crecimiento a lo largo de corredores con eje en las trazas ferroviarias radiales. Así estructuraron la metrópoli 7 corredores metropolitanos: Norte, Noroeste, Oeste, Sudoeste, Sur, Sur-Sudeste y Sudeste.

Uno de ellos, quedó estancado en su crecimiento, debido a la suspensión de su servicio ferroviario, promediando los años´70: muchas de las localidades que habían surgido con un incipiente desarrollo, quedaron paralizadas en su evolución, tal es así que la traza en su entorno más periférico permanece aún hoy con áreas rurales; mientras otras localidades, por ejemplo, entorno a estaciones en la intersección con otros corredores transversales, lograron un crecimiento de diverso tipo, residencial o comercial, en muchos casos con entornos informales.

Nos interesa en este trabajo indagar entorno a las categorías de corredores vigentes, que se enfocan en criterios de demanda, estableciendo 6 corredores, olvidando el Sur-Sudeste, cuando si bien el mismo perdió su oferta, quedan latentes localidades, usos del suelo y una población que requiere mejoras en la movilidad de sus viajes diarios. Trabajamos entonces con la hipótesis que este séptimo corredor sigue vigente entorno al potencial de movilidad basada en los usos del suelo próximos a la traza ferroviaria, proponiendo categorías amplias, que no se centren en la mera planificación de la demanda o de la oferta, si no sean superadoras, tendiendo como conclusión a explorar soluciones para las realidades más urgentes de la periferia del Conurbano Bonaerense.