Categorías cromáticas: conjuntos de colores como instrumento estándar para diversas investigaciones

Abstract

Muchas investigaciones sobre color utilizan conjuntos de colores como instrumento. Por ejemplo, los estudios sobre preferencias cromáticas realizan encuestas con muestras de color para que los sujetos expresen sus predilecciones. Con instrumentos similares se realizan investigaciones sobre asociaciones de color, marketing, color y conducta, color y personalidad, color y bienestar, emociones, sentimientos, semántica y psicología del color. El problema es que todas ellas emplean como instrumento conjuntos de colores ad hoc, y es imposible así comparar resultados. Existe un caso donde sí se ha generalizado un instrumento con colores estándar. Para estudios sobre nombres básicos de color en lenguas y culturas, a partir de Berlin y Kay, todas las investigaciones han empleado un repertorio de colores extraído de la superficie del sistema Munsell, al que se adosa la escala blanco, negro y grises. Eso permite que las investigaciones sean comparables y que distintos grupos de investigación realicen un relevamiento mundial de nombres de color (World Color Survey). No obstante, ese conjunto de colores tiene una limitación: incluye acromáticos, tintes saturados, colores que a partir de cada tinte saturado se mezclan con blanco (pasteles) y con negro (sombras), pero ningún color de la categoría de tonos, o sea, colores desaturados, grisáceos. Salvo el eje acromático, no hay colores del interior del sólido Munsell.

Nuestro objetivo es desarrollar una serie de conjuntos estándar de colores que sirvan como instrumento en diversas investigaciones. Teniendo en cuenta que se puede requerir un mayor o menor número de muestras, proponemos varios conjuntos (por ejemplo, a partir del sistema Munsell):

básico: 11 o 12 colores de las categorías de Berlin y Kay

pequeño: alrededor de 20 colores

mediano: alrededor de 40 colores

grande: alrededor de 80 colores

extendido: alrededor de 140 colores

Debido a la claridad conceptual de este criterio y a la posibilidad de representarlo con muestras de cualquier sistema de color tridimensional moderno que tenga un atlas de referencia, más allá del Munsell, creemos que cubriría una necesidad que aún no está resuelta satisfactoriamente.