Categorías de clasificación de usos de suelos en un Paisaje Cultural. El caso de la Quebrada de Humahuaca (Jujuy, Argentina)

Abstract

Desde variadas perspectivas disciplinares se puede observar que analizar el territorio implica clasificar.  André Corboz anunció hace décadas que la dicotomía urbano / rural está superándose, sin embargo, sigue existiendo la necesidad de clasificar el territorio, analizando y replanteando sus características para su investigación o planificación. Así, a una primera distinción entre lo urbano y lo rural, se fueron sumando clasificaciones: Urbano / rural / periurbano; gradientes de urbanidad / ruralidad; territorio de borde / centro; urbano/ rururbano / rural / rústico o natural; territorios centrales / intermedios / de borde; campo / ciudad / interfase; gradientes de densidad poblacional / constructiva; tierras públicas, privadas y fiscales; etc. Estas categorías son dependientes de cada plan, proyecto o institución que las define, presentan diferentes objetivos y recortes. 

A fin de poder aportar al ordenamiento territorial de un Paisaje Cultural, nos encontramos con la dificultad de clasificar el territorio. Entendemos el ordenamiento territorial como una herramienta metodológica destinada a ordenar la ocupación humana y el uso que hace la sociedad del espacio. En este sentido, la delimitación entre áreas urbanas, periurbanas, rururbanas, rurales, rústicas, entre otras, son categorías de análisis imprescindibles para una tesis o un plan.

Teniendo en cuenta las variadas clasificaciones existentes desde diferentes miradas, y sobre distintos territorios, nos interesa indagar sobre las clasificaciones que explican y ordenan un Paisaje Cultural, declarado Patrimonio de la Humanidad. En particular, la Quebrada de Humahuaca, que ha sido reconocida e incluida en la Lista de Patrimonio Mundial y por la UNESCO en el 2003, como tal, ha sido objeto de diversos estudios, políticas públicas, planificaciones y proyectos. Los estudios, proyectos y planes centrados en el diagnóstico y el ordenamiento de la Quebrada de Humahuaca recurren a nociones básicas de este territorio como su delimitación y la interpretación de sus particularidades. Muchas veces, para la delimitación del territorio y de áreas o zonas dentro de él, se recurre a categorías de análisis, entre ellas el uso de suelo. Por ejemplo, en el Programa de Ordenamiento Territorial y Medio Ambiente (POT), realizado en 2006, se distinguen 12 unidades del paisaje de la quebrada.

En este sentido, aquí nos proponemos analizar las categorías de clasificación de usos del suelo dentro de la delimitación patrimonial, comprender sus dificultades, particularidades, alcances y limitaciones y proponer nuevas categorías específicas para analizar un Paisaje Cultural a fin de plantear las bases para su ordenamiento territorial. Para ello, revisamos y comparamos las clasificaciones de suelo existentes en los planes, normativas, instituciones e investigaciones sobre el área patrimonial en estudio. Luego, las contrastamos con el análisis in situ y del dibujo, redibujo y análisis sobre imágenes satelitales y datos de organismos oficiales sobre los usos del suelo.